Amusic es
un joven guerrero íbero que vive en Anabis y quiere robar las enseñas romanas
de una legión. El símbolo del poder más preciado por Roma, y el mejor guardado por
los soldados que formaban la élite de sus legiones. Para ello contará con sus
amigos; el nubio Typa y Deva, la amiga con la que conocerá la llegada de nuevos
sentimientos.
Los tres vivirán
aventuras sorprendentes en un mundo extraño y antiguo, con creencias apegadas a
los dioses y a las cosas, y donde la muerte y la vida penden de un hilo cada
día. En su inquieto recorrido por la geografía de la zona, encontraran a
indiketas, ausetanos, ilergetes o cesetanos y Amusic aprenderá conceptos como
la pérdida de la inocencia, la importancia de la amistad, y el verdadero
sentido del valor.
Su padre Brigo es
mercenario y lucha a las órdenes de Aníbal. Participa en la guerra junto a Abato,
un íbero que guarda las espaldas del caudillo cartaginés. Brigo escribe cartas
a su hijo, y en ellas le cuenta el curso de la segunda guerra púnica y le habla
de los Alpes, Trebia, Tesino, Cannas o Siracusa, y de hombres como Aníbal, Escipión,
Sempronio o Arquímedes o el propio lacetano Abato.